En una era donde la tecnología avanzada y la inteligencia artificial amenazan con vulnerar toda barrera de privacidad online, el cineasta mexicano Gibrán Bazán explora en su última película, “NUDUS”, el aterrador escenario de un hackeo sin precedentes, capaz de exponer los datos de 6 mil millones de personas, según anticipan informes de Interpol y especialistas en ciberseguridad. Esta premisa de horror psicológico sirve como telón de fondo para una historia que sumerge a la protagonista, Laura Cohen, interpretada por Carla Hernández, en un laberinto de terror y desesperación al descubrir que toda su vida digital ha sido vulnerada
“Todo lo que hoy publicas será utilizado en tu contra en un mundo donde la privacidad siempre ha sido una ilusión”, advierte la película, encarnando los temores actuales sobre cómo la interacción con las redes sociales y la dependencia de la tecnología pueden convertirse en nuestra peor pesadilla. A través de un guion que mezcla habilidosamente el terror con la ciencia ficción, Bazán invita a reflexionar sobre la pérdida de privacidad y cómo, en un abrir y cerrar de ojos, podemos convertirnos en víctimas de nuestra propia huella digital.
Con un elenco que incluye a Álex Crusa, Sayaka Yokoyama, Myriam Behar y Vita Vargas, entre otros, “NUDUS” se destaca no solo por su narrativa inquietante sino también por su profundo análisis de la condición humana frente a la omnipresencia de la tecnología. La película, octava producción de Marsash Cinema, conocida por sus coproducciones internacionales y trabajos anteriores como “Arritmia”, promete ser un hito en el cine de terror psicológico mexicano.
Además de su relevante temática, “NUDUS” sorprende con una estética visual estilizada y actuaciones que capturan la esencia de un thriller psicológico, llevando al espectador a cuestionar la realidad misma. Este lanzamiento cinematográfico, que ya ha debutado en varias ciudades de Estados Unidos y se prepara para su estreno en más de 700 salas en México gracias a CNMG Distribución y Kinema Scope, no sólo promete entretener sino también invitar a una profunda reflexión sobre nuestra vulnerabilidad en el mundo digital.