¿Tu adolescente siempre está enviando mensajes de texto? ¿O jugando videojuegos? ¿O simplemente no lo sabes?
“Siempre hemos dicho a los padres que intenten supervisar el contenido en línea de sus hijos que traten de limitarlo, asegurarse de que no esté afectando su sueño, su trabajo escolar o su estado de ánimo”, dice la Dra.Nusheen Ameenuddin, pediatra en Mayo Clinic y miembro de la American Academy of Pediatrics.
Eso, reconoce, es un trabajo enorme. Los niños pueden conectarse a Internet literalmente desde la palma de sus manos.
“Para los padres, recomendaría que se comuniquen con sus hijos y traten de averiguar qué están haciendo cuando están en línea”, dice ella. “¿Están pasando tiempo jugando juegos con amigos? ¿O están buscando cosas? ¿Lo están utilizando para hacer tareas escolares?”
El uso excesivo de las redes sociales puede estar relacionado con cómo afecta a su hijo, dice.
“Cualquier cosa que esté perjudicando el sueño de su hijo, cualquier cosa que esté afectando su estado de ánimo, cualquier cosa que esté disminuyendo su rendimiento académico se consideraría un uso excesivo”, dice la Dra. Ameenuddin.
Ella dice que los padres y los cuidadores adultos conocen mejor a sus hijos y probablemente estén en la mejor posición para saber qué puede ser considerado excesivo y qué no. Si estás preocupado, recomienda, habla con el pediatra de tu hijo o con el equipo de atención médica para recibir consejos.
Consejos para el tiempo de pantalla
El tiempo de pantalla puede referirse al tiempo que se pasa en teléfonos inteligentes, tabletas, televisores o dispositivos de juegos. Eso podría significar enviar mensajes de texto a amigos, ver videos o películas, jugar juegos, hacer tareas y navegar por Internet.
Aquí hay algunas formas de ayudar a establecer hábitos saludables de tiempo de pantalla.
Comunicación: habla abiertamente con tus hijos sobre los videojuegos y el contenido con el que interactúan en línea.
Establece períodos sin pantallas: designa momentos sin pantallas, como las comidas y una hora antes de acostarse.
Carga en el dormitorio: anímalos a cargar los dispositivos fuera del dormitorio, para mejorar el sueño.
Pon el ejemplo: demuestra hábitos saludables de tiempo de pantalla, como poner tu teléfono en “no molestar” durante el tiempo en familia y durante la cena.
Recuerda que cada familia y cada niño es diferente, por lo que es importante encontrar un equilibrio adecuado en cuanto al uso de la tecnología. Mantener una comunicación abierta y establecer límites claros puede ayudar a garantizar un uso saludable de las pantallas y promover un estilo de vida equilibrado para tus hijos.
Courtesy: Mayo Clinic News Network