Consejos para cuidar tus discos de estado sólido

En el marco de la iniciativa Kingston Is With You, la compañía Kingston Technology, especializada en productos de memoria y soluciones tecnológicas, brindar algunos consejos a sus usuarios para cuidar la vida útil de las Unidades de Estado Sólido (SSD), tecnología que se ha convertido en el medio más seguro de almacenamiento para cualquier computadora, ya sea de escritorio, portátil, servidores y estaciones de trabajo, debido a su alta confiabilidad, resistencia y durabilidad, en comparación con los discos duros tradicionales que tienen partes móviles.

Además de los cuidados cotidianos, como proteger las unidades de cortes de energía, temperaturas excesivas o caídas, Kingston recomienda a los usuarios apagar sus computadoras de manera correcta, no forzar el apagado, adquirir modelos de SSD más recientes, realizar copias de seguridad de los datos de forma periódica y revisar que se realicen las actualizaciones del BIOS relacionadas con el almacenamiento.

En este sentido, la empresa cuenta con una herramienta gratuita para el cuidado de las unidades SSD, tanto internas como externas, llamada Kingston SSD Manager (KSM). La herramienta es fácil de usar, permitiendo al usuario consultar las actualizaciones necesarias para el firmware de su SSD, recibir notificaciones cuando una nueva actualización esté disponible para los SSD registrados, monitorear la salud, el estado y el uso del espacio de la unidad de estado sólido, así como ver datos de identificación de la unidad, exportar informes detallados sobre el estado de la unidad, actualizar el firmware de la unidad y eliminar datos de forma segura.

Geraldine Stack, Business Manager de SSD y Flash para Latinoamérica en Kingston, comenta que es una buena práctica comprobar periódicamente el estado de los SSD. KSM permite controlar de forma continua el estado del SSD, obtener información importante sobre el uso de la unidad, alertar al usuario sobre actualizaciones disponibles de firmware e investigar problemas que podrían sugerir que se acerca el final de la vida útil del producto. Si el estado de la unidad ha disminuido drásticamente durante su vida útil, se debe considerar actualizarla a una unidad de alto rendimiento.